Tiempo de chismorreo

La tertulia, el chismorreo, el poder se han convertido en el eje de los medios de comunicación. Los periodistas ejercen de politólogos. Y lo hacen a la carrera, a toda prisa; a falta de una formación básica, recurren a tópicos, a estereotipos o a simples panfletos.

Para comprender y trascender la realidad, la sociedad y la convivencia sobran las argucias. Se requiere reflexión, la actitud propia del filósofo, y un bagaje intelectual y cultural tanto más solvente cuanto más complejo.

De la distancia entre lo uno y lo otro se deriva el lastre irrespirable de la situación actual:  cuando las conclusiones preceden a las preguntas. Cuando alguien aduce, a modo de defensa, que dice lo que piensa, sin comprender que resultaría mucho más responsable pensar lo que dice.

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