
El cardenal Cañizares celebra el 80 aniversario del 18 de Julio, del Golpe de Estado y del inicio de la Guerra Civil, con una misa en honor del primer golpista y el dictador, el máximo responsables de decenas de miles de muertos, de represaliados, de exiliados, de condenados a muerte…
La televisión pública española homenajea la efemérides con la proyección de ¡El santuario no se rinde!, una película propagandística de aquella barbarie.
Otra cadena, ésta privada, pero que también recibe dineros públicos, glosa la efemérides con varios programas.
No hay disculpas. El Gobierno calla. Estas víctimas no cuentan.
