
La esperanza de vida fue una esperanza que daba alicientes a la vida.
La esperanza de vida se ha convertido en un castigo que resta expectativas a la vida.
En una taberna de pueblo, donde antes algunos pensionistas celebraban a diario la partida y el carajillo, y donde ahora mantienen la partida a veces con agua del grifo, escuché esta conversación.
– Dicen que van a bajar las pensiones por culpa de la esperanza de vida.
– Ya te digo, con unas u otras excusas, nos están quitando la esperanza.
– Mientras no nos quiten la vida…
– De eso se ocupan los que quieren acabar con la sanidad pública.
– Están en todo…
– Nos ha jodido…
