31/07/2023. Al paso que vamos, que es el que todavía marcan unos resultados electorales harto complicados, a buena parte de los españoles les gustaría vivir en Catalunya, mientras que a buena parte de los catalanes les gustaría vivir en Madrid.
¿Sí o no? Muchos españoles reconocen la sensatez del voto emitido por los catalanes y no pocos catalanes valoran el pedigrí independentista de la presidenta de la Comunidad de Madrid y futura lideresa del PP, y subiendo.
¿Un sofisma? Mucho ojo, que las cosas pueden precipitarse y Ayuso puede crear una comparsa carnavalesca a ritmo de chotis: Madrid, Madrid, Madrid, requiebro de la España en que nací.
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Junts es de derechas y su nacionalismo resulta coherente. Esquerra es nacionalista –como Bildu o el PNV– y su izquierdismo representa un valor secundario, aunque necesario para distinguirse de Junts. Que ahora se unan para negociar el Gobierno de España evidencia que, al menos para ellos, lo primero es lo primero. Resulta tan evidente que hasta puede que voten –sin quererlo– a favor de Feijóo y de Abascal. ¡Ese pecado no admite arrepentimiento y, en consecuencia tampoco perdón.
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Junts puede presionar cuanto quiera y pedir lo que le plazca. Pero deberá tener en cuenta, más allá de lo que puede ganar, lo que puede perder… con unas nuevas elecciones y, quién sabe, con Vox en el Gobierno. No acierto a saber qué puede decidir al respecto Puigdemont en particular y, si le importa, Catalunya en general. LO que si acierto a intuir es la que, a todos, nos puede caer…
