“Hemos trabajado mucho para saquear nuestro país”.
La frase de la señora Cospedal pronunciada durante un mitin en Guadalajara ha recorrido las redes sociales a la velocidad de los bites y ha aparecido en todos los medios de comunicación.
A fin de cuentas, en ella no se vertían las habituales, en estos días, promesas electorales, sino verdades como puños.
Dicho… y hecho.
Después de lo de Rato, y al socaire de la frasecita, la Agencia Tributaria ha descubierto que al fraile Trillo le abonaron 345.000 euros sin factura y que al aguerrido Pujalte (aunque sin bigote, sigue igual que el facha Martínez –¿o era él?–) le libraron 75.000. En ambos casos sin mediar la contraprestación de informe escrito alguno.
A la vista de tales hazañas, este país va a tener verdaderos problemas para aceptarse y regenerarse mientras sigan ocultas fechorías fiscales que su máximo gestor calificó como “la repera patatera”.
¡O sea, que menos cachondeo!
Apostilla
l País, siempre protector de los débiles, ha querido sacarnos de dudas respecto a la frase fallida de la secretaria general. Afirma él que ella quiso decir “Nos ha costado mucho trabajo sacar a nuestro país adelante”. Que eso era lo que tenía escrito, pero se le fue la pinza y dijo “saquear” por “sacar” y los malintencionados suprimieron el “adelante”, lo que, según el intérprete, habría disipado cualquier duda.
Sin embargo, los ciudadanos están convencidos de que unos y otros han saqueado el país adelante y adetrás. Sin cachondeo.